tag:blogger.com,1999:blog-8520153810047626714.post8116447647317351348..comments2024-01-17T10:54:12.114-08:00Comments on La Isla Desconocida: A propósito de los silencios y de la crítica en CubaEnrique Ubieta Gómezhttp://www.blogger.com/profile/06961515684461279240noreply@blogger.comBlogger4125tag:blogger.com,1999:blog-8520153810047626714.post-44195929017090088262014-06-10T06:51:39.841-07:002014-06-10T06:51:39.841-07:00Mientras se argumente en contra de los errores (hu...Mientras se argumente en contra de los errores (humanos) de los revolucionarios que hacen la revolución, obviando los obstáculos de los conservadores que han creado el consenso de las normas del poder, no tendrán "derecho" a exponer sus ideas como propósito a seguir. hay un proyecto de sociedad en la revolución socialista, y sobre él cae el prejuicio del poder validado en la era moderna, que ejerce el miedo de la exclusión moral sobre los ciudadanos que no lo compartan, y el miedo de la exclusión ciudadana sobre aquellos que la transgredan.<br />García Borrero demuestra dos vertientes del prejuicio: primero niega el trasfondo de Ubieta cuando habla en nombre de los revolucionarios, considerando que esa posturo acreciente el miedo a la opinión en la sociedad, y luego, usa un método de representación de la política moderna capitalista cuando pide para la presidencia de Cuba a una mujer, negra y lesbiana, sin que "a nadie le parezca excéntrico".<br />Mientras estos atributos parezcan excéntricos, estarán vigentes las normas burguesas de valoración moral y los revolucionarios no habrán logrado desterrarlas de los patrones de evaluación para el sujeto que construyen. Pero ello no niega el llamado al camino, la reconstitución, que no se hace a través de las propuestas del capitalismo moderno.<br />El mismo prejuicio se refleja cuando sugiere que los revolucionarios no están en condiciones de realizar un socialismo "que no dé miedo", para lo cual se apoya en Foucault, sin aclarar, como le pide al autor, a qué punto de la historia humana se refiere el filósofo francés en su advertencia. ¿se renuncia al proyecto revolucionario "por no estar en condiciones" de lograrlo de inmediato? ¿Se entrega la plaza al capitalismo dependiente? ¿Se deja a la cultura en manos de la norma hegemónica de la industria que al capital responde?<br />Y así pueden seguir las interrogantes que la respuesta de García Borrero deja.... más allá de las dudas de las cuales se queja.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8520153810047626714.post-32904064751534193532014-06-10T06:30:47.878-07:002014-06-10T06:30:47.878-07:00De acuerdo, aunque no me convence.
(¿Pierre Menard...De acuerdo, aunque no me convence.<br />(¿Pierre Menard?)Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8520153810047626714.post-59375102571131822742014-06-06T15:12:59.938-07:002014-06-06T15:12:59.938-07:00Lei el articulo Notas sobre el silencio…..es algo ...Lei el articulo Notas sobre el silencio…..es algo para meditar y lo creo bueno.<br /><br />" los revolucionarios, vemos ( debemos ver ) el mundo con los ojos de los oprimidos. El ángulo de los opresores no cuenta."<br /><br />Buena definición.<br /><br />La experiencia dice que cada cual ve la vida de acuerdo a la posición que se asigna dentro de ella, el que tu crees que eres o mereces ser. De eso sale la posición del individuo en el aspecto ideológico.<br /><br />Creo en que el origen social no es un limitante ni determinante, y eso esta probado.<br /><br />Lo que para muchos es dificil aceptar "de forma absoluta" es la gran realidad de que en la vida todos somos iguales y tenemos los mismos derechos. Es decir, que cada vez que se vea el sufrimiento del oprimido, sentirlo como propio, sentirlo con la gran posibilidad de …..podria ser yo?<br /><br />A esa realidad de que todos somos iguales debemos agregar "no todos tenemos las mismas posibilidades" referido a las<br />posibilidades reales de intervenir en el proceso de formación social, ahora referido a posibilidades intelectuales y no de posición o cargo , a partir de ahí se definen dos caminos, el de los que creen las cosas pueden ser de mas o menos o los<br />que mantienen la buena definición señalada al inicio.<br /><br />Desde luego que en la lucha se cometen errores…… y hasta el sol tiene manchas y nadie se acuerda de ellas.<br /><br />Muy bueno lo escrito sobre Marti, el decidió elegir la lucha afirmando su credo en Dos Rios y aunque se lamente la perdida de su caudal intelectual por su temprana muerte, nadie duda de lo justo de su decisión, era lo que correspondía.Anonymousnoreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-8520153810047626714.post-37082812108847348522014-06-06T13:30:13.459-07:002014-06-06T13:30:13.459-07:00Si los más capaces reflexionan, también me tomo mi...Si los más capaces reflexionan, también me tomo mi tiempo, pero al seguir esta polémica, se me ocurrió esta reflexión que propongo tener en cuenta a los contendientes:<br /><br />Cada vez que se afronta un argumento parecido al que cuenta Ubieta que le repite algún amigo de que la verdad es un cristal que se hizo añicos y ahora cada parte está en manos de muchos, uno recuerda el sabroso diálogo entre Agamenón, su porquero y alguien que, según le cuenta Juan de Mairena a sus alumnos acaba de declarar:<br /><br />La verdad es la verdad, dígala Agamenón o su porquero.<br />Agamenón. - Conforme.<br />El porquero. —No me convence.<br /><br />Y claro que el argumento no convence, no sólo al que uno imagina no muy cultivado porquero que aquí se muestra tan sabio en su aparente simpleza, sino que no debiera convencer a nadie que no sea, claro está…Agamenón. Muchas polémicas debieran abrirse o cerrarse con ese brevísimo breviario de sabiduría<br /><br />Una prueba sólida de que las polémicas se convierten en un clásico diálogo entre sordos cuando centran sus argumentos en la posesión de una verdad, se puede obtener del simple hecho de que un contendiente, al argumentar contra la concepción adversaria, no puede evitar la declaración, así sea tácita, de la posesión, precisamente, de una verdad, es decir, la o las verdades con la que intenta refutar al otro. No parece ser entonces ese el camino más fecundo para que una polémica llegue al puerto de la utilidad pública.<br /><br />Quizás por eso tantos polemistas acuden al brumoso expediente de relativizar los fundamentos de la verdad, dígala quien dígala. Con ello logran moverse, y obligan al adversario a tratar de avanzar, en un suelo cenagoso e inseguro en que pueden señalar al otro que están continuamente resbalando, faltos del asidero de la razón definitiva o parcial, porque, al fin y al cabo, la verdad sería relativa y estaría en todas partes a la vez, y como el estado de una partícula cuántica en que todos sus parámetros se superponen y sólo una de sus propiedades es posible medirla cuando colapsa su indeterminación al intervenir el observador, la verdad saldría a flote y sería atrapada sólo en el momento de ser enunciada por el relativo observador de la realidad. Si del principio de incertidumbre de los estados cuánticos se ha derivado una mirada estocástica de la realidad y la verdad, se podría sospechar que, de todas las analogías y paradigmas físicos que se han trasladado a la reflexión filosófica del tejido social, ninguna quizás en más nefasta, porque si la verdad está en todas partes, eso equivale a que no está en ninguna, tal como afirman los físicos que sucede con las partículas del micromundo y entonces habría muy poco que cambiar por más que muchos se muestren tan paladines de los cambios y las libertades. Cosa que conviene, y cuánto, a todos los Agamenones.<br />Calos Luquehttp://chilecuba.wordpress.comnoreply@blogger.com