Llegué de México, y al día siguiente inicié un recorrido por las provincias centrales del país. Volveré sobre esto después, pero ahora quiero mostrar las fotos que tomé de una estatua del Che, del Guerrillero Heroico, que se encuentra situada a la entrada del edificio que sirvió de sede para su estado mayor –hoy sede del Partido Provincial–, durante los gloriosos días de la toma de Santa Clara. La estatua es del español Casto Solano Marroyo, y reproduce en pequeño formato escenas de su vida. En un bolsillo de la camisa, el Che cabalga como Don Quijote con la adarga al brazo. No quiero que se me escape octubre, para homenajear a ese símbolo de la redención humana que los cubanos veneramos. FOTOS: E. U. G.
El peligroso ejemplo de Cuba
Hace 10 horas
No hay comentarios:
Publicar un comentario