En la foto aparecen Baltasar Garzón y uno de los autores del libro, Carlos Tablante
Carlos Aznárez
Resumen Latinoamericano
Un claro llamado de atención para quienes en Argentina y otros países latinoamericanos siguen arropando y cantando loas al comportamiento bipolar del ex magistrado. Acaba de publicarse en Venezuela Bolivariana, de la mano de los sectores más recalcitrantes de la oposición al gobierno chavista de Nicolás Maduro, el libro "Estado Delincuente. (Como actúa la delincuencia organizada en Venezuela)", escrito por dos conspicuos miembros del staff del fascista Henrique Capriles Radonski. Se trata de Carlos Tablante y Marcos Tarre, quienes cuentan esta vez con el prólogo de Baltasar Garzón para este libelo que destila mentiras y odio al proceso revolucionario. Carlos Tablante es el típico converso, ya que proviniendo del MAS (Movimiento al Socialismo) realizó un recorrido por izquierda hasta que llegó a ser gobernador del estado de Aragua, luego diputado y finalmente se sumó al coro de escuálidos que comenzaron a conspirar contra el gobierno revolucionario de Hugo Chávez. Actualmente, integra el movimiento Voluntad Popular, uno de los tantos satélites minúsculos que sostienen el accionar terrorista de Capriles. Por su parte, Marcos Tarre es columnista habitual del diario ultra opositor "El Nazional", desde donde carga con munición gruesa contra cada una de las medidas progresistas del gobierno bolivariano, amén de haber sido parte de la diatriba de insultos cotidianos que este "periódico" lanzara contra Chávez durante todo su mandato. Estos son los escribas que ahora, junto a su prologuista y "gran amigo" (como ellos lo caracterizaron) Baltasar Garzón, lanzan a la venta el engendro denominado "Estado Delincuente", El propio Tablante no oculta las intenciones del libro: "Poner en el tapete el debate sobre las redes de la corrupción que se han ido consolidando en Venezuela, vinculadas a un conjunto de delitos, muchos de ellos con la participación de funcionarios de alto nivel, beneficiados por la impunidad. Se han ido creando las condiciones de un Estado delincuente, donde lo lícito se mezcla con lo ilícito y quien se empeña en realizar actividades legales, está permanentemente acechado, recibiendo las tentaciones de un estado corrupto”. Garzón, que tiene larga fama en España de haber sido un juez represor, cómplice fundamental de darle cobertura a los apremios y torturas a presos vascos, catalanes y de otras nacionalidades, es viejo amigo de la oposición fascistoide venezolana, ya que en su momento participó activamente en la campaña de defensa del canal derechista RCTV. En ese momento, Garzón atacó a Chávez acusándolo de "cercenador de la libertad de expresión", lo que le valió una precisa respuesta del ex canciller Maduro y del dirigente del PSUV, Jorge Rodríguez: "Garzón es un payaso que viene a Venezuela a apoyar a los golpistas". (ver http://www.youtube.com/watch?v=Y7gjqSd2W2Q ) Ahora, el ex juez vuelve a insistir en su afán de adulador con el "caprilismo", y sin decir una palabra sobre los crímenes de la oposición hacia los militantes chavistas, sale a cantar loas a un libro que lo único que busca es atacar a un gobierno, que precisamente está encarando todo tipo de acciones para terminar con la delincuencia organizada y cuyas raíces están ancladas en políticos, empresarios y amanuenses del "caprilismo" y sus paramilitares. Es interesante leer lo que dice otro "periodista" de "El Nazional", sobre el libro y el aporte de Garzón. Se trata de Héctor Faúndez, quien señala: "En el prólogo de este libro, Baltazar Garzón observa que Venezuela se ha aislado del resto de la sociedad internacional, y que ese aislamiento hace más difícil combatir el crimen organizado". Más claro, agua. Cabe señalar también que Garzón actualmente está protegido por el gobierno argentino, cobrando un suculento sueldo por "asesorar" en derechos humanos. Por dinerillos similares, el ex juez asesoró a Uribe Vélez y al actual presidente Santos en Colombia, lo que provocó que varias organizaciones campesinas e indígenas lo repudiaran en su momento. De la mano del diputado Remo Carlotto suele pasearse por los foros locales para hablar del "dolor" que le causan las violaciones de derechos humanos o de su "sensibilidad" frente "a la falta de libertad de expresión en el mundo" (justamente él que cerrara periódicos y radios en el País Vasco, con total impunidad, que enviara a varios periodistas a prisión, luego de padecer torturas por parte de la Guardia Civil española, precisamente por informar con veracidad). Garzon, que no deja un espacio internacional sin tocar, para blanquear su pasado represor simulando ponerse "del lado de los perseguidos", cuando lo que realmente le interesa es montar shows publicitarios y mediáticos que endulcen aún más su egolatría armada con mentiras. Si faltara algo para su carrera de "sumar medallas", recientemente recibió de las manos de la presidenta Cristina Fernández su documento de identidad argentino (algo que no le resulta tan fácil obtener a miles de inmigrantes que viven en Argentina y que han hecho muchos más méritos laborales y de vida que el ex juez español), y decidió radicarse en Argentina, donde lamentablemente cuenta con el aval de algunos luchadores en el ámbito de los derechos humanos que no saben o (lo que es peor) no quieren enterarse, de quien es en realidad este personaje que hoy acaba de prologar un libro más de la oposición destituyente contra el gobierno revolucionario bolivariano.